Llegas a casa, después de un interminable día de trabajo, un trabajo, que hace que roces la locura, 12 horas de trabajo, en las que has estado completamente solo, donde no has mantenido ninguna conversación, donde, las únicas palabras que as dicho en todo el día es: "¿perdona, me cambias, para tabaco?" has hablado solo durante horas, incluso has mantenido una conversación imaginaria con ella, si, con ella, hablabas de cosas que querías contarle, de cosas, que querías hacer con ella, de sorpresas que querías hacerle...y todo eso, ha sido fruto de tu mente... Has comido un simple bocadillo que te has preparado a las 5 de la mañana, y en tu estomago solo ha entrado una bebida energética a media mañana...Además, este resfriado, no te ha dejado tranquilo en todo el día, y cuando llegas a casa, harto de fumar, y con la boca seca, a penas tienes hambre, vas a la cocina como un zombie, e intentas buscar algo que te llame la atención, para llevarte a la boca, pero....nada te apetece, preparas un café y te recuestas en la silla de tu cuarto mientras te fumas tu décimo quinto cigarro de esta ultima hora, al terminar, te levantas, decidido, te duchas, y te arreglas un poco, incluso te recortas el pelo y la barba, y te engominas, tienes que alejar la cara de cansancio del cuerpo, además, lo que mas deseas, en todo el día, está a punto de sucedes, vas a verla, parece, que no todo es malo en estas navidades. Ella está contigo, y te ha regalado su compañía, que mas puedo pedir...Sales decidido, con tu mejor cara, dispuesta a regalarle amor y simpatía, a ofrecerle un millón de besos, un millón de abrazos. Impaciente, esperas en aquel portón frío, un sms, hace que se me caiga el mundo, te hecho de menos, necesito tus besos, te necesito a ti.
De vuelta a mi casa, todo parece vacío, no es por tu culpa, ni por la mía, ha sido un mal entendido, era solo, que tenía ganas de verte.
Al llegar a casa, una llamada, de mi tía, hacía años que no la oía, que bien suena su voz por teléfono, que de imágenes me hace recordad su voz, miles de imágenes de mi infancia, de trastadas, de broncas por hacerle travesuras a mis primos, por vestirlos de chica, por desvertirlos, por hacerles comer tierra, o por hacerle pis en sus sabanas...que de recuerdos, mi abuela, mi familia junta una noche de sábado al rededor de aquella mesa-camilla del minúsculo salón de aquel piso de una casa de vecinos... Y su voz transporta un cálido mensaje, este 25, nos reunimos, valla parece, que esta navidad, estoy de suerte, mi quebrantada familia, va a verse, o una parte al menos...
Mientras la emoción me inunda, en este interminable día, otro sms me avisa a gritos, tu, no estás, y sé que es tuyo, y que no transporta buenas noticias.
El mundo vuelve a caerse, eres la única persona capaz de elevarme al cielo, y la única capaz de hacerme bajar al infierno con una simple palabra, con un simple gesto tuyo...sabes? te amo, eres, lo que le da sentido a mis días sin sentido, tu pasado no importa, importa el ahora, el presente, importa tú y yo, y nadie más, olvida lo que falló, olvida lo que salió mal, yo no soy ellos, no me trates igual, no te lamentes de tus antiguos errores, porque conmigo no has cometido ninguno, y sobre todo, no dudes lo que tenemos, porque eso, me duele...grábate a fuego, lo que siento por ti, lo que te quiero, lo que te amo, que me eres necesaria, que me alegras el día, que, para ti si soy incondicional, y que si me pides que valla, ahora, voy.
Supongo que ahora, lo mejor, será irse a la cama, a intentar descansar, con los ojos abiertos, e intentar alejar lagrimas, y pensamientos que me aterran, porque siempre lo dije, para mi, esto es un sueño, y no quiero despertar, porque, lo que me ha pasado, contigo, es digno de ello
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